El tercer paraíso, de Cristian Alarcón

El tercer paraiso

Fue después de una charla de la Fiesta del Libro y la Rosa, en la UNAM, cuando caminando entre los estantes vi “El Tercer Paraíso”, la primera novela de Cristian Alarcón que además es la ganadora del Premio Alfaguara de Novela 2022. La concepción total de la novela es increíble, desde la hiperrealista portada del artista argentino Alejandro Pasquale, y por supuesto las dos historias de no ficción en torno a la botánica y su historia personal que narra el escritor, periodista y fundador de la revista Anfibia y el sitio Cosecha Roja.

Esta novela híbrida contada desde el poblado de La Unión, en Daglipulli, al sur de Chile, es un libro no binario, sin género – literario al menos – ya que se entrelazan dos historias de no ficción con datos de la historia de la Botánica Universal y anécdotas de la vida y exilio del autor y sus ancestras. Es decir, es un libro que no es una novela propiamente, pero tampoco es un archivo histórico sobre la naturaleza, tampoco un ensayo sobre el amor a la naturaleza, es muchas cosas al mismo tiempo.

“Las flores de este paraíso nos dicen a todos que esta tarde somos parte del jardín”

Cuando uno va al encuentro con la naturaleza, habitualmente nos maravillamos de los paisajes con montañas, árboles, flores, ríos, fauna y demás cuerpos vivientes que habitan ahí, sin embargo, nos olvidamos que nosotros mismos somos también parte de esa naturaleza ¿por qué autoexcluirnos de lo que somos? Nuestros cuerpos cambian y se mueven constantemente, a veces somos parte de un hermoso jardín y a veces somos parte de una majestuosa montaña. En este libro, Alarcón propone un amor por la naturaleza y por ende, un amor por quienes somos y de dónde venimos.

La parte antropológica de la Botánica Universal que nos presenta el autor es un deleite. Desde los inicios con Aristóteles y Tofrasto, hasta Carlos Linneo, Alexander Humbodt y Gilles Clément. Es un viaje a las expediciones que se realizaron para dotarle de una estructura a todos los nombres, propiedades y tipos de plantas que conocemos en la actualidad. Por citar un ejemplo: La dalia mexicana, la flor nacional de México fue nombrada acocoxochitl por los entonces botánicos de la Gran Tenochtitlán, sin embargo, cinco siglos después un español llamado Antonio Jose Cavanilles, director de los Jardines Reales de Madrid, le otorgo el nombre de “Dalia”, en honor al médico y botánico sueco Anders Dahl, alumno de Linneo, considerado el creador de la clasificación de los seres vivos o taxonomía.

A la par de todo este viaje histórico, Alarcón también nos narra la historia de lucha de sus ancestras ante el sistema patriarcal, mujeres que como muchas en Latinoamérica han sufrido la violencia de género, obligadas a agachar la cabeza y someterse a la crianza de muchos hijos sin ningún tipo de recompensa o gratificación, sólo golpes y amenazas. En este sentido, el autor también pone sobre la mesa un tema que es fundamental en la actualidad, el feminismo ha estado latente desde nuestras ancestras, no sólo hoy con los colectivos y las mujeres que salen cada día a protestar. Aún hay trabajo por hacer en torno al feminismo, y uno muy importante es el reconocimiento y la visibilización de la lucha de nuestras ancestras.  

Finalmente, quiero decirles que el “Tercer Paraíso” no tiene nada que ver con historias religiosas ni argumentos rebuscados. Se trata simplemente de construir nuestro destino, mirar en nuestro interior, buscar las respuestas en nuestras raíces, encontrar nuestro jardín, regarlo todos los días, cuidarlo, respetarlo, procurarlo y volver a él las veces que sea necesario. El Tercer Paraíso somos nosotrxs.

BONUS TRACK

Me tardé unos tres días en leer este increíble libro de Cristian Alarcón, como dijeron en España, es un libro luminoso que me ha hecho reflexionar en la historia de mis abuelas ¿Cuántas historias no se contaron? ¿Cuántos secretos guardaron? ¿Qué hubiera sido de ellas si no hubieran conocido a mis abuelos?

Me gusta pensar que cuando vivían, ellas me miraban siendo un niño y en su corazón cabía una pizca de esperanza al pensar que yo sería la generación del cambio, una generación que buscaría una sociedad más igualitaria y respetuosa del entorno.

Y sí, abuelitas, soy parte de esta generación, la que está intentando cambiarlo todo.

2 comentarios

  1. Oscar

    Gracias a tu reseña, tengo unas ganas imperiosa de comprar y leer ese libro.

  2. Oscar Aguilar

    Gracias a ti reseña tengo unas ganas imperiosas de leer esa novela. Buena reseña.

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